lunes, 10 de octubre de 2016

¡Volvemos!

Hace mucho que no me paso por aquí, casi seis meses. Algo que durante largas épocas se convertía en rutina, lo he dejado apartado en un ‘cajón’ por largas semanas. Aunque los motivos son varios, sobre todo ha habido una causa por encima de todas. No ha sido un tiempo bueno en el plano deportivo, otra vez tocaba luchar con las lesiones, apartarse de la competición, de la rutina de los entrenamientos y dedicarse a otros menesteres. Las redes sociales y las  múltiples ventanas que te ofrece internet para explayarte me gustan bastante, pero hay ciertos aspectos que no me gustan. Los que las utilizamos habitualmente en alguna ocasión lo hemos hecho para cubrir esa necesidad de saciar nuestro ego, pero es en los momentos malos donde lo encajo peor. Haced la prueba, ¿qué genera más comentarios? ¿una publicación de un logro o de éxito, o una publicación de un problema o un fracaso? En mi caso siempre se lleva la palma el segundo escenario. Y no me gusta, lo entiendo porque la gente que te conoce quiere empatizar contigo, mostrarte su apoyo, pero no me siento a gusto con ello. Esta es la principal causa de este parón. Ahora ya estoy bien, retomamos el cuaderno de bitácora.

En estos meses han pasado bastantes cosas. Una pubalgia con su edema oseo que ha dado mucha guerra, pero que al final ha decidido decirme adiós. Una vez salvada la lesión, he podido comenzar a entrenar más o menos con normalidad, este año lo voy hacer supervisándome yo mismo los entrenamientos y la planificación. No es una decisión que sea definitiva a largo plazo, pero me apetecía probar durante una temporada. Podré experimentar conmigo mismo, probar estímulos que me apetece mucho probar y como siempre analizar el resultado. Además han pasado muchos kilómetros a lomos de la bicicleta de carretera, tiradas largas, tiradas cortas, rápidas, salidas sociales y algún que otro puertecillo. Lo que me ha llevado a decidirme a que el año que viene me centraré prioritariamente en la temporada de duatlón, estoy cansado de intentarlo en vano una y otra vez con la pista. Tengo por delante mucho aprendizaje pero también muchas ganas e ilusión.


También se acabó una etapa importante en mi vida. He dejado de ser entrenador de León Corre. Una etapa preciosa que ha sumado muchísimo en mi vida y que me ha aportado cosas positivas en momentos buenos y no tan buenos, que me ha hecho cruzarme con personas fantásticas y que siempre me ha dado más de lo que yo le he podido dar. Necesitaba parar un poco y coger aire; la única forma era desligarme de alguna de mis obligaciones, y por otro lado quería seguir intentando entrenar a un nivel aceptable. Tengo que agradecer a Villa la oportunidad que me brindó hace más de tres años, que me ha permitido vivir decenas y cientos de experiencias inolvidables, y crecer como entrenador y como persona un poquito más. Me he marchado por la puerta de delante, como lo haces cuando te marchas de casa de un amigo después de una buena cena y su consiguiente fiesta por todo lo alto. En definitiva siempre seguiré siendo entrenador de León Corre, mi figura estará ligada siempre a ellos.

Y después de 8 semanas desde que puede volver a entrenar, empieza lo bueno, lo divertido. Lo de ponerse un dorsal y ver hasta donde puedes llegar. Ayer viendo desde la barrera los 10 km de León, se me iban los pies solos. Me habría gustado participar pero todavía no estoy preparado. En dos semanas espero estarlo, para comenzar a batallar. Será en la VII Nocturna de Toledo. ¡Volvemos!

4 comentarios:

jose Nogales dijo...

Gran noticia tu vuelta Guille.

Unknown dijo...

eres muy grande Guille un placer tenerte de entrenador gran persona gran atleta y una de las personas más apasionadas que conozco en este mundo del running te deseo muchísima suerte en tu camino.

Saturnino dijo...

Me alegro de tu vuelta y de que las lesiones sean ya pasado. Ahora a volver a dar guerra y a disfrutar.
Un saludo.

Rafael dijo...


Seguro que ya por fin tienes continuidad en los entrenamientos, ya te va tocando, mucho animo, vamos¡¡¡¡.Estas muy a tiempo de hacer una buena San Silvestre, que se te dan muy bien, lo contrario que a mi, yo con frio no voy.
Un abrazo.